viernes, 14 de octubre de 2011

La isla basura del Pacífico

Vivimos en la sociedad de riesgos. Atrás quedó el tiempo en el que nuestras preocupaciones se centraban en el avance tecnológico y el aumento de la producción sin atender a las consecuencias medio ambientales. En esta sociedad cada acción produce una reacción y la gran cantidad de desechos de plástico generados, especialmente desde los años 50, ya tienen su propia consecuencia: Una inmensa isla de basura flotando en el giro oceánico del Pacífico Norte que contamina toda la vida marina de la zona y del planeta.


Localización de la gran sopa flotante


En el mundo existen cinco grandes giros oceánicos producidos por los movimientos de viento, el efecto Coriolis y la vorticidad planetaria . Dos de ellos se encuentran en el océano Atlántico, uno en el Índico y otros dos en el Pacífico. Es precisamente en este último donde en 1997 el oceanógrafo Charles Moore descubrió una gigantesca isla de plástico, también llamada sopa de plástico. Su ubicación varía con las corrientes marinas pero se calcula que principalmente está establecida entre Hawái y Japón a unas 1.000 millas de la costa.


Composición de la isla basura


Esta sopa está compuesta por unos 100 millones de toneladas de desechos procedentes principalmente de Asia y Norte América. Su superficie es de 1.400.000 km2, casi tres veces la superficie que tiene España y se calcula que en ella hay seis partes de basura por cada una de vida animal.


Mientras que cierta cantidad de plástico se queda flotando, la mayoría se va deshaciendo hasta alcanzar tamaños microscópicos y finalmente se mezcla con el plancton.


Consecuencias de la sopa tóxica


Científicamente, se sabe muy poco acerca de la magnitud del problema y las amenazas a la vida marina y el medio ambiente.


El plástico puede absorber los metales pesados tóxicos y debido a su pequeño tamaño los peces lo ingieren. Se calcula que al año mueren 100.000 mamíferos y 1.000.000 de aves debido a esta contaminación. Aquellos animales que sobreviven a los tóxicos pasan a contaminar el resto de la cadena alimentaria hasta llegar a los humanos.


Posibles soluciones


El principal problema es que este fenómeno ha sido descubierto hace relativamente poco tiempo y las iniciativas para solucionarlo son escasas. En general se cree que es muy difícil eliminar toda la cantidad de residuos debido a su tamaño por lo que la solución es la prevención.


Sí existen algunos proyectos que merece la pena destacar como el de Richard Owen, un contratista de la construcción que en 2008 fundó la Enviromental Cleaneup Coalition (ECC) y el Gyre Cleaneup Project que plantea como un desafío de la ingeniería buscar una solución para la limpieza del Pacífico Norte.


El ECC ya ha desarrollado varios prototipos de dispositivos para la recogida de plásticos y ha modificado un barco para convertirlo en un “barredor de océanos”.


Por otro lado en 2008 se fundó en la bahía de San Francisco el Proyecto Kasei cuyo primer objetivo era llamar la atención por la gran cantidad de desechos que se han acumulado en los océanos en los últimos 50 años. En la actualidad esta organización se ha convertido en un punto de encuentro entre ciencia, industria y política y ha obtenido reconocimientos del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente y de Google como héroes de Google Earth por su trabajo de seguimiento a través de video blogs.


Algo flota en el Atlántico


En 2010 grupos científicos comprobaron que otra mancha de basura se encuentra en la zona oeste del Atlántico Norte aunque de momento los primeros datos hacen pensar que su tamaño y densidad son menores que los del Pacífico y que apenas ha variado en los últimos 20 años.


Muchas son las señales que se observan por todo el planeta que nos avisan de que las consecuencias de nuestros actos están cada vez más próximas. Cercana está la generación que tendrá que juzgar lo que la humanidad ha hecho hasta el momento y entonces ¿cuál será su veredicto?.


A continuación podéis ver un minidocumental sobre el tema en el siguiente enlace.


1 comentario:

  1. Las compañías que utilizan productos no biodegradables deben de ayudar con la recogida o control de toda esa basura. Deberían tomar una muestra y la compañía con mayor cantidad de botellas o productos encontrados deberían pagar una multa monetaria o una orden dirigida públicamente a esa compañía haciendo que tenga que recoger x kilómetros de basura encontrados en esa isla. Las compañías que ha hoy comercialicen, utilicen o fabriquen productos que no son biodegradables deberían por ley pagar un impuesto que contribuye con el cuidado del medio ambiente, incluir y promover en sus propagandas el reciclaje de los mismos e invertir en investigación y desarrollo para crear productos que minimicen o no dañen el medio ambiente.

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